Hospital de Chillán logra un 90 por ciento de sobrevida de prematuros extremos
Hace 20 años solo el 50 por ciento de las niñas o niños nacidos con 30 semanas de gestación sobrevivía. Actualmente, un 90 por ciento de las guaguas nacidas a las 26 semanas logra sobrevivir. Esta realidad, es posible gracias a los avances de la perinatología, la tecnología y los cuidados intensivos y dedicados del personal de esas áreas.
Es por eso, que, en el Hospital Clínico Herminda Martín, desde hace cuatro años, se realiza una ceremonia de graduación cada vez que un pequeño se va a su hogar con su familia, instancia donde además se reconocer su valentía y la dedicación de sus seres queridos.
En el marco de una nueva conmemoración del Día del Niño Prematuro, el Dr. Julio Salas Cárcamo, jefe de la Unidad de Neonatología, destacó que se han instaurado estas celebraciones ‘para realzar lo relevante que es la mejora en las expectativas de vida de los niños prematuros y más aún, de aquellos con extrema prematurez, que dos décadas atrás, presentaban una elevada tasa de mortalidad y de secuelas neurológicas. ‘Hoy esto manifiesta una notoria disminución, gracias a los avances de la medicina, especialización de los equipos perinatales, tecnología de los instrumentos utilizados en su monitoreo permanente y más aún, en el caso de las trabajadoras de nuestro Hospital, la vocación, cercanía y cariño, con el que cuidan a cada uno de los pacientes que recibimos en la Unidad’, señaló el profesional médico.
Al respecto, el Dr. Max Besser Valenzuela, subdirector de Gestión Asistencial del Servicio de Salud Ñuble, sostuvo que ‘en esta conmemoración, reconocemos la labor de la Unidad de Neonatología del Hospital Clínico Herminda Martín, que desarrolla un gran trabajo junto a los niños y sus familias brindado atención de calidad y calidez durante sus primeros días de vida. En Ñuble, este es el único establecimiento que cuenta con esta prestación, una gran responsabilidad, pero también nos habla de la calidad de los equipos de nuestra red pública de salud”.
Para quienes no tienen la experiencia de un nacimiento prematuro, la reducción de las secuelas y el aumento de la expectativa de vida puede ser solo una estadística. No obstante, para Paola Lobos y Gonzalo Castillo, padres de María Jesús que lleva 25 días hospitalizada y ahora está en la sección intermedia, es esperanzador. La bebé nació con 28 semanas de gestación y es motivo de orgullo para sus padres, por eso, no dudan en acompañarla y vivir cada día, con el apoyo del equipo de la Unidad de Neonatología.
En lo que va de este año, 12 bebés han sido reconocidos en las graduaciones de prematuros, destacando el valor y también la constancia de ellos mismos, de sus padres y de los cuidadores, que son el equipo clínico que les recibe, atiende y se encariña al punto de sentirse primeras mamás, tías, tíos, vínculo que se hace notorio, en celebraciones como el Día del Prematuro, que se realiza con el propósito de mantener el estrecho vínculo de las y los funcionarios de la Unidad de Neonatología y sus pacientes y familiares e incluye además diversas actividades como disfraces, juegos, regalos.
